jueves, 10 de octubre de 2013

Retomamos el ritmo. Operación de juanetes, un éxito.

Ya iba siendo hora de actualizar esto un poco después del verano. Parece que poco a poco va volviendo todo a la normalidad, los niños al cole y los papis al curro (el que lo tengo, porque tal y como esta el panorama, hoy por hoy es un lujo tener trabajo).

Hoy quería mostraros nuestra última intervención de Hallux Valgus, o para los neófitos en el tema, Juanetes.

Se trata de una paciente que era antigua bailarina y profesora de baile en un conservatorio ruso (ahí es nada) y actualmente trabaja como peluquera (posiblemente una de las peores combinaciones para los pies que podamos imaginar). H.A.V. muy doloroso, inflamado e invalidante para su vida diaria.

La paciente esta contentísima, no ha notado nada de dolor y la inflamación postquirúrgica es muy leve. A mi juicio un resultado muy satisfactorio.

Tengo que agradecer públicamente su ayuda a Fernando Martínez Merino, gran compañero y mejor persona, sin él difícilmente hubieran salido adelante.


Como vemos, ambos pies están afectados por el mismo padecimiento.


 En éste caso, el tratamiento quirúrgico inicial se centrará en corregir la deformidad del primer dedo del pie izquierdo, así como la articulación metatarsofalángica. El otro pie lo dejamos para mas adelante. No es que no se puedan hacer los dos al tiempo, pero no es lo más recomendable y, si se puede evitar, es mejor hacerlo primero uno y a los 3-6 meses el otro.



Para éste proceso empleamos la Técnica Austin, también llamada de Chevron, consistente en realizar una osteotomía en la cabeza del metatarsiano con forma de ángulo o punta de flecha, como muestra la siguiente imagen.

Con ello, conseguimos un grado de corrección muy bueno, además de respetar la integridad del cartílago articular y la articulación en si. Es una osteotomía tremendamente estable. Algunos autores incluso sugieren la posibilidad de que no es necesaria la fijación y osteosíntesis posterior, simplemente un buen vendaje compresivo e inmovilización. 
Bajo mi punto de vista, no es necesario jugársela a lo tonto, y ya que tenemos el campo abierto, no cuesta ningún trabajo colocar una aguja o un tornillo en esa cabeza y poder dormir tranquilo. Los que realicen cirugía sabrán de qué les hablo.

Bueno, pues tras la intervención, colocamos a nuestra paciente una bota Walker (a ser posible corto) y le pedimos que camine lo exclusivamente imprescindible y apoyando sólo el talón. Algunos compañeros me dirán que no es necesario, pero me gusta ser muy escrupuloso en ese sentido y poner todos los medios que estén a mi alcance para que no haya ningún problema.


Ahora os muestro las imágenes de la primera cura, tras una semana de la intervención. Como vemos hay una inflamación casi imperceptible y una equímosis moderada. La paciente esta muy contenta y no ha tenido apenas molestia alguna, puesto que a pesar de ser una cirugía de cierta importancia, si se toman las medidas adecuadas y se administra/receta una medicación post operatoria correcta, las molestias son anecdóticas.




Éstas imágenes corresponden a la 2ª cura, es decir, 2 semanas después de intervenir el juanete. Como vemos no hay inflamación, y los hematomas han disminuido considerablemente, quedando sólo las marcas de las zonas de punción del anestésico. Por supuesto nuestra paciente esta encantada de la vida. No toma analgésico alguno y mantiene su bota Walker.




 Aquí apreciamos perfectamente la osteotomía y la aguja colocada para fijarla. En los laterales del meta se puede ver la formación del callo óseo, paso previo a la reparación del hueso y que una ves consolide éste, desaparecerá por completo, dejando una levísima marca de su presencia que puede llegar a ser imperceptible en el futuro.



Por último os muestro las imágenes a las tres semanas de la intervención. Como vemos, ya se han retirado las suturas externas (las internas, que también las lleva, evidentemente son reabsorbibles). Es conveniente colocar una tiras de Steri-Strips en la zona de la incisión y traccionarlas levemente en la colocación para disminuir la tensión de la zona y con ello, disminuir la futura cicatriz que se formará en la zona y las posibles adherencias que pudieran darse.
Realmente la cicatriz que se produce no es nada del otro jueves, pero si podemos ayudar a que sea aún menor, pues bienvenido sea.

Vemos que la equímosis que queda es ya totalmente residual y que no hay inflamación ni maceración de los tejidos.


¿Parece que se ha operado de juanetes hace 3 semanas? Juzguen ustedes mismos...


En definitiva, una cirugía limpia, sencilla y resolutiva. Tenemos que empezar a despejar aquellos miedos que provocaba la cirugía de juanetes y desterrar aquella mala fama que siempre ha tenido, ya que es algo totalmente injustificado. El problema no es la cirugía, es quien la practica, y por desgracia, aquí en Almería se han hecho muchas barbaridades...

Por si a alguien no le ha quedado claro, aquí os dejo algunas preguntas frecuentes y ciudados post operatorios de los juanetes.


¿Porque me tengo que operar los Juanetes?

Los Juanetes o HAV, no son sólo una alteración estética que produce un bulto en el perfil del pie, sino que se trata de una alteración funcional, esto es de la función y efectividad del pie.
La articulación del primer dedo, con el tiempo se ha ido desviando. Esta desviación provoca problemas a distintos niveles, tanto en la misma articulación, produciendo una artrosis y una disminución del movimiento del dedo gordo, como en el resto del pie, provocando sobrecargas de otras estructuras que nos llevan a callos en la planta del pie, dedos desviados en martillo o en garra, dolor en los tobillos, alteraciones en las rodillas e incluso afectación de la espalda.
Sólo una correcta realineación de la articulación podrá recuperar estas alteraciones y evitar mayores problemas a largo plazo.
Una mala cirugía, suele eliminar exclusivamente el bulto lateral. En nuestro caso realizamos una cirugía reparadora, capaz de recuperar la alineación y la movilidad de la articulación.

¿Hay que esperar a que los juanetes duelan mucho para hacer una cirugía?

No, en ningún caso. Es totalmente contraindicado. Cuánto más tiempo pasa mayores y más importantes son las consecuencias en cadena que nos provoca el hecho de tener un juanete. A la larga la articulación se desgasta y se vuelve artrósica y el resto de estructuras del pie también se resienten y llegan a deformarse, junto con toda la cascada de alteraciones biomecánicas asociadas que aparecerán. Por ello es conveniente realinear la articulación lo antes posible, incluso si no hay dolor.
El hecho de esperar a que "ya no se pueda más" puede responder a una falta de expectativas de buenos resultados por parte de quien hace la cirugía.

¿La cirugía del juanete es dolorosa?

No. Una buena cirugía, cuidadosa, accediendo sin dañar los tejidos internos, con un buen tratamiento personalizado antiinflamatorio y analgésico postquirúrgico no es dolorosa. Nuestra experiencia es que los pacientes no se aquejan prácticamente de dolor, y en todo caso si este aparece, es sólo durante las primeras 24 horas y se puede controlar con un buen analgésico.
Durante el acto quirúrgico el paciente está anestesiado localmente o sedado, por tanto tampoco siente dolor.

¿La recuperación de la cirugía del juanete es larga?

La recuperación de la cirugía del juanete requiere de aproximadamente unas 4 semanas de reposo relativo.
El paciente no queda ingresado, ni tiene que hacer cama. Se puede andar desde el primer momento con precaución y sin excederse ni en distancia ni en tiempo, para cada paciente se establece un calendario y programa de recuperación personalizado. El paciente deberá vigilar de no cargar en exceso la zona operada durante unos días.
Destacar que no hay ninguna técnica quirúrgica capaz de reducir el tiempo de recuperación. Tras una correcta realineación del juanete las 4 semanas de reposo relativo son prácticamente seguras, necesarias e importantes para una corrección garantizada. Si en una semana ya se da el alta, quiere decir que o no se ha hecho una buena realineación y sólo se ha incidido estéticamente en el bulto lateral, o bien existe el peligro de que no se consigan los resultados esperados.


¿La cirugía láser o percutánea es mejor para operar un juanete?

No es mejor ni peor. Desde nuestro punto de vista lo importante es garantizar unos grados concretos de corrección, y para eso hay que valorar en cada caso la mejor forma de conseguirlo.

La mal llamada cirugía laser (el laser no interviene en ningún momento en estas intervenciones), es un tipo de cirugía percutánea, o sea, a través de la piel, con la que se hacen una serie de cortes en los huesos, mediante fresas metálicas que lijan, desbastan el hueso y lo cortan. Se hace sin apenas apertura de la piel y por tanto el campo quirúrgico no está a la vista. No permite fijar los huesos.
La cirugía abierta permite en los casos que sea necesario:
·         Un campo de visión amplio y limpio con el que podemos ver directamente las zonas que precisan modificación y cómo la realizamos.
·         La cirugía abierta nos permite utilizar un aparataje de microcirugía muy preciso que nos guía a la hora de manipular los huesos de la articulación, modificarlos los grados calculados matemáticamente que habíamos previsto y dejarlos en su sitio.
·         Además podemos dejar fijadas, mediante grapas, placas o tornillos, las precisas modificaciones que hacemos en los huesos.

Debemos destacar que no es cierto, (y estudios publicados lo demuestran) que la cirugía percutánea provoque menos inflamación, menos dolor y menos tiempo de recuperación que la cirugía abierta, por lo tanto, estas no deben ser las razones por elegir una opción u otra.

¿Tendré que llevar plantillas después de la cirugía del juanete?

La cirugía del juanete incide únicamente en la articulación del dedo y la coloca en su sitio. Si existen otros problemas biomecánicos a nivel de tobillo, planta del pie, dedos... se intentarán reconocer previamente para recomendarle al paciente posibles soluciones.
Las plantillas no sustituyen en ningún caso la cirugía del juanete ni viceversa.

¿Cómo y cuando son las curas posteriores a la operación?

El vendaje se cambia cada semana durante las primeras 8 semanas, y las suturas de piel se retiran aproximadamente a las 2-3 semanas posteriores a la intervención.
Empleamos también agujas Kirschner que nos ayudan en la osteosíntesis y que quedan por fuera de la piel. La aguja Kirschner suele ser tirada en consulta alrededor de la cuarta semana después de la intervención, y se abandonan los vendajes al cabo de 6 u 8 semanas.

¿Qué calzado podré utilizar después de la cirugía del juanete?

Normalmente durante las primeras 4 semanas se utiliza un calzado postquirúrgico que le proporcionamos nosotros, para que pueda andar de la mejor forma posible sin alterar ningún elemento de la cirugía. Después se empieza por un calzado ancho normalmente deportivo y la 5 ª semana ya se puede calzar normal, usando un zapato blando, y se comienzan los ejercicios de movilidad activos y pasivos, para recuperar la movilidad articular.
Recuerde que éstos son plazos generales, que en su caso particular pueden verse modificados, dependiendo de su proceso.

¿La cirugía del juanete será definitiva para toda la vida?

. Con nuestro tipo de cirugía la corrección es definitiva. Es importante tener también en cuenta y descubrir otras posibles alteraciones que acompañan a la desviación del juanete para tratarlas y prevenirlas.

¿Puedo operarme el juanete si tengo mala circulación o varices?

La mala circulación en las piernas no impide poder operar los Juanetes. En caso de que así ocurra, en nuestra clínica hacemos sistemáticamente un control, derivando al especialista de medicina vascular, y tomamos las medidas intraquirúrgicas necesarias, así como las indicaciones postquirúrgicas: medicación, ejercicios... para disminuir al máximo los posibles riesgos.

¿Hasta qué edad se puede operar un juanete?

No hay límites de edad si la cirugía está bien indicada y el estado general del paciente no presenta alteraciones incompatibles con este tipo de cirugía.

¿Tengo que coger la baja laboral?

Si. Una buena cirugía del juanete requiere de una inactividad laboral. Dependiendo del tipo de trabajo podrá reiniciar con más o menos tiempo.

 

¿Cuándo podré conducir después de la cirugía del Juanete?

Normalmente se puede conducir a las 4-5 semanas de la intervención.

¿Hay que poner alguna fijación, como por ejemplo un tornillo, en la cirugía del juanete?

Si. La corrección y alineación de una articulación requiere de una estabilidad importante durante las primeras semanas para que quede fijado para siempre, en la posición exacta que hemos determinado. Por eso es tan importante no se mueva aquello que hemos corregido. Nosotros siempre fijamos las correcciones. Normalmente con tornillos de Titanio de alta calidad (pureza) o tornillos reabsorbibles que cuando ha pasado el tiempo de consolidación de los huesos desaparecen. Salvo raras excepciones, no es necesario retirar esos tornillos nunca.
Por otro lado, se emplean también agujas Kirschner que nos ayudan en la osteosíntesis y que quedan por fuera de la piel. La aguja Kirschner suele ser tirada en consulta alrededor de la cuarta semana después de la intervención.

¿Tendré que hacer recuperación después de la cirugía?

Si. Durante el seguimiento postquirúrgico que realizamos en nuestra clínica, recomendamos que un Fisioterapeuta realice tratamientos antiinflamatorios con ultrasonidos y masaje, y una recuperación funcional de la movilidad de dicho pie pasiva y activa, indicando qué tipo de ejercicio a realizar en cada momento de la recuperación

¿Qué tipo de seguimiento y control me harán después de la cirugía?

En nuestra clínica el seguimiento postquirúrgico tiene una duración de 3 meses durante los cuales está siempre en contacto directo con el cirujano. Se hace un control semanal, donde se analiza el proceso de cicatrización de los huesos y la nueva conformación del pie. Además el paciente tiene un teléfono de contacto 24h directo con el cirujano.

¿Qué tipo de anestesia me pondrán?

La anestesia es local. Se pone a nivel de tobillo y sólo se duerme el pie. Por eso no requiere de tiempo de recuperación después de la intervención y el paciente puede irse inmediatamente hacia su domicilio.

En algunos casos empleamos anestesia regional y/o sedación, bloqueando a nivel de rodilla, para lo cual nos asiste un Anestesista que se encarga de todo el proceso, para su mayor confort y seguridad.

¿La anestesia es dolorosa?

La infiltración de la anestesia puede provocar cierto dolor aunque con una buena técnica, cuidadosa y pausada, conseguimos disminuir al máximo esta sensación. Contamos con un anestesista para que el bloqueo nervioso sea el idóneo en cada caso.

¿Después de la cirugía del Juanete podré utilizar tacones?

Si. Nuestra operación de juanete pretende alcanzar el máximo de movilidad del 1er dedo y esta es una de las premisas para poder calzar tacones sin problemas. De todas formas hay que decir que unos tacones muy exagerados no son recomendables para nadie, ni por tanto, tampoco para una persona que se halla sometido a una operación de juanetes.


Un saludo!!!!